El Grafisch Museum de Groningen era el segundo destino en el periplo de BunkerType en Holanda. Allí nos dirigimos junto al inseparable Toni Ortega para presentar «The New Call», el último trabajo de BunkerType dedicado a HN Werkman, uno de los hijos pródigos de la ciudad.
Algo más de dos horas en tren separan Amsterdam de Groningen, una de las ciudades situadas más al norte de Holanda, en la que HN Werkman fundó su primera imprenta y donde vivió hasta que la Gestapo lo arrestó y lo fusiló en Abril de 1945. Ese fin de semana -y con motivo del 70 aniversario de su muerte- se cerraba un año dedicado a ensalzar y difundir su obra y su legado, y la sensación de poder formar parte de todo aquello fue, sin lugar a dudas, una de las sensaciones más íntimamente emocionantes que me ha aportado mi recorrido como «bunkerman».
GRID,
Grafisch Museum Groningen
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El GRID es un museo de muy reciente creación que cuenta, entre otros espacios y servicios, con una gran colección de maquinaria de impresión de todo tipo. Se trata de un museo vivo en el que se pueden admirar las piezas que componen su recorrido, pero también se puede participar de ellas en cualquiera de los muchos talleres que proponen.
Otro de los momentos más emocionantes lo viví cuando con una paciencia infinita y un flemático ingles (acordes con mi paupérrimo dominio de la lengua británica) Fronique -la amable directora del GRID- iba indicándome algunas de las curiosidades acerca de las diferentes piezas que nos íbamos encontrando. Una vez en el «Werkman Atelier», y tras unos cuantos intentos, entendí -atónito- que una de las dos prensas que tenía justo al lado era la que usaba el mismo autor en su taller, así que por un buen rato no pude despegarme del contacto con el tirador de la vieja Dingler Press de 1850 que usaba el admirado Werkman. La sensación de estar ahí era de nuevo apasionante. El honor que mi colección compartiera espacio con algo tan íntimo para el artista como su prensa de trabajo, indescriptible.
Sin duda un viaje que guardo en mi memoria con mucha emoción, cariño y agradecimiento para todos; para los amigos del Grafisch Werkcentrum de Amsterdam y del Grafisch Museum Groningen por su invitación y su exquisito trato y para el amigo Toni Ortega, por su atención, esfuerzo y compañía. ¡Gracias a todos!
